Hacerse cargo de nuestra situación económica no es fácil. Hay que tener en cuenta qué gastos vamos a tener, cuándo vamos a cobrar, cuánto dinero tenemos ahorrado, etc. Y si esto mismo lo aplicamos a una empresa, las obligaciones aumentan y la figura del asesor contable se vuelve imprescindible.
Al igual que en nuestra vida diaria nos hacemos cargo de nuestra situación económica y controlamos las facturas a final de mes, las empresas tienen que hacer frente a una serie de cálculos: los costes de producción, la administración de inventario o las nóminas de los trabajadores. En definitiva, necesitan tener entre sus empleados a una persona responsable del papeleo y de la situación financiera de la entidad. A esta persona se la conoce como asesor contable.
Todas las empresas, ya sean grandes o pequeñas, deben contratar un asesor que se ocupe de la contabilidad.
¿Qué es un asesor contable?
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Un asesor contable es una persona con conocimientos en micro y macroeconomía que se ocupa de llevar el plan financiero de una entidad. Analiza la situación económica para solucionar posibles problemas y mejorar la gestión.
Su actividad más importante consiste en confeccionar las cuentas anuales de la empresa según el Plan General de Contabilidad (PGC) para después depositar los documentos correspondientes en el Registro Mercantil.
El objetivo final no es otro que el de estar pendiente de la entrada y salida de capital dentro de la organización.
Plan General de Contabilidad
Cada año, los empresarios deben depositar en el Registro Mercantil sus cuentas anuales. Esta información que hay que presentar se recoge en el Plan General de Contabilidad, el documento que determina la información que ha de presentar cada empresa para cumplir con la normativa.
El documento final y que se encarga de hacer el asesor contable, debe recoger los principios contables y criterios de valoración, las normas de registro, las cuentas anuales y el cuadro de cuentas. Dentro de las cuentas anuales siempre hay que incluir el Balance General, la información del Patrimonio Neto y la Cuenta de Resultados.
Para las pymes este documento puede variar, ya que, no todas las pequeñas y medianas empresas deben presentarlo. Tan solo aquellas con menos de 50 empleados en sus plantillas y que no sobrepasen una cifra de negocios mayor de 8 millones euros y un activo mayor de 4 millones de euros. A diferencia de las grandes empresas, las pymes no deben presentar los gastos e ingresos del patrimonio neto. Solo deben depositar el Balance de Situación y el informe con las pérdidas y ganancias.
Funciones del asesor contable
El asesor contable no se limita a hacer cuentas y depositar los documentos finales en el Registro Mercantil, sino que lleva a cabo muchas más actividades:
- Controla los libros de contabilidad y clasifica los documentos: todas las operaciones diarias de la empresa deben quedar reflejadas por escrito. El asesor también se encarga de ordenarlas.
- Anota cada uno de los movimientos económicos que se producen en la empresa: los costes de producción, los gastos internos y la adquisición de nuevos productos.
- Realiza todos los trámites legales: darse de alta en la Seguridad Social y depositar las cuentas en el Registro Mercantil, entre otros.
- Administra los bienes de la empresa: objetos físicos como la maquinaria, los muebles o el dinero.
- Asesora al cliente para que tome decisiones: el asesor debe ser partícipe de la empresa, saber cómo se trabaja, qué es lo que falla o qué se hace bien para poder generar propuestas de mejora y decidir qué camino es el que hay que tomar.
